19 de octubre, Día Mundial del Cáncer de Mama
Antonio Ares Camerino
Desde hace unos años el rosa es un color que se ha identificado con la lucha contra el cáncer de mama. Lazos rosa, marchas rosa, maratones rosa. Como un Tsunami rosa podemos describir al movimiento asociativo formado por cientos de asociaciones que en España tienen como objetivos ayudar a las mujeres que padecen o han padecido un cáncer de mama, y sensibilizar antes esta “epidemia” a la sociedad en general.
Las conclusiones a las que llegan las sociedades científicas son que el cáncer de mama ha aumentado su incidencia de manera importante en las dos últimas décadas, pero que a su vez ha aumentado en mayor medida su supervivencia, con un descenso de la mortalidad por tal causa del 1,4% por año.
Alrededor de dos millones de españolas pueden padecer un cáncer de mama a lo largo de su vida, y más de la mitad lo harán antes de la menopausia.
Las mujeres con riesgo elevado de cáncer de mama plantean nuevos retos sanitarios, distintas opciones de prevención e innovadoras medidas terapéuticas. Por suerte cada día aparecen avances en tratamientos que ilusionan a las pacientes con una curación definitiva, o cuando menos con una mejora de su calidad de vida.
Las recomendaciones preventivas pasan por evitar aquellos factores de riesgo a los que la evidencia muestra como más importantes. Evitar el consumo de tabaco, evitar el consumo de alcohol, combatir la obesidad, fomentar la realización de ejercicio físico, potenciar la lactancia materna y reducir los tratamientos hormonales. En cuanto a la prevención secundaria, diagnóstico precoz, la mamografía es el único método de cribado que se ha revelado como eficaz. Si su cobertura supera el 70% se puede reducir la mortalidad por cáncer de mama en un 20-30% en mujeres de más de 50 años (International Agency for Research on Cancer, IARC 2008).
Recientemente un nuevo reto se ha hecho presente. Cómo solventar las dificultades a las que se enfrentan las mujeres que han superado la enfermedad, o están en vías de hacerlo. Ello supone atender a estas mujeres desde el punto de vista emocional, socioeconómico y laboral.
Sin la ayuda de las Asociaciones de Pacientes y de profesionales, no sólo del ámbito sanitario, sino también del jurídico, laboral y psicosociológico. Sin la concienciación de las diferentes Administraciones, y la complicidad de los empleadores y demás agentes sociales, será imposible recuperar ese tremendo potencial humano que aportan las mujeres que han superado y vencido al cáncer de mama.
Organización Mundial de la salud
www.who.int/topics/cancer/breastcancer/es/index.html
Asociación Española Contra el Cáncer
www.aecc.es/sobreelcancer/cancerporlocalización/cancermama/aspx
Sociedad Española de Oncología Médica
www.seom.org/seomcms/hablemos_cancer_mama.pf