Antonio Ares Camerino
5 de diciembre de 2021, Día Internacional de los Voluntarios
El título de esa película, interpretada por Helen Hunt, Haley Joel Osment y Kevin Spacey, en España fue “Cadena de favores”. Trevor, un niño de 11 años, decide hacer un experimento en su clase de sociales. Su intención era sólo mejorar el mundo que le rodeaba. Tanta acritud, tanta violencia, tanto desapego, le hacían sentirse mal. Él intuía que detrás de la cotidianeidad hostil había personas dispuestas a dar lo mejor de sí sin pedir nada a cambio. Con sólo un deseo, y unas ganas enormes de hacer el bien a los demás, se propuso hacer pequeños favores a tres personas de su entorno. Su única condición era que ellos deberían hacerlo a otras tres, y así sucesivamente. El efecto multiplicador tendría consecuencias inesperadas.
Este año la cadena se ha trasladado al Día de la Suerte. El próximo 22 de diciembre, Sorteo de Navidad, nadie estará libre de un eslabón de esa cadena. La pedrea o el reintegro, el primer o el último. Todo un país habrá colaborado con esa ilusión que hace que el dar sea mejor que el poseer, que el regalar no tenga comparación con el recibir.
Cada 5 de diciembre se celebra el Día Internacional de los Voluntarios. Ello supone una oportunidad para manifestar el agradecimiento a todos los esfuerzos realizados por voluntarios anónimos, por personas que aportan esa carga de ilusión y optimismo ante tanto desatino. Son muchas las organizaciones, que desde todos los ámbitos y a todos los niveles, hacen que la realidad sea mucho más llevadera. Promover valores que suman solidaridad en un mundo enemigo marcado por intereses económicos y por poderes que no contemplan al ser humano como centro de la existencia, se convierte en el reto más arriesgado que tiene la sociedad. En nuestro país, son cientos de miles las personas voluntarias que cada año contribuyen a hacer que este mundo sea más vivible. El voluntariado se ha convertido en un elemento creador de transformación social, ambiental y económica. Con el único objetivo de hacer un planeta mejor el voluntariado cambia mentalidades, actitudes y comportamientos de personas, e incluso de gobiernos y de grandes núcleos de poder. La libertad individual y colectiva, el compromiso con causas difíciles, la equidad y la igualdad, la transversalidad y la empatía, el respeto por los demás, y sobre todo por el diferente, convierten al voluntariado en un elemento nuclear de una sociedad en la que se ha hecho imprescindible.
Da igual que sea ante una catástrofe natural, no importa que sea ante un conflicto bélico, todo un ejército de hombres y mujeres voluntarios brindan sus esfuerzos y energías para mitigar el dolor y la desesperación de los que se han convertido en vulnerables. Si existe algún derecho humano que se encuentre cercenado por gobiernos totalitarios, si se encuentran en peligro la salud o la educación, si el hambre y la falta de lo más básico para una vida digna se convierten en cotidianos, allí surgirán voluntarios dispuestos a garantizar el derecho a la vida, a la libertad y a los derechos fundamentales recogidos en la Carta Magna de la Humanidad.
La Fundación Internacional de Derechos Humanos, Greenpeace España, Médicos sin Fronteras, Amigos de la Tierra y Unicef, conforman la lista de las organizaciones de voluntarios de nuestro país que cuentan con más seguidores.
Las asociaciones de voluntariado realizan sus actividades en cuatro grandes áreas. Las de caridad, que son aquellas que están enfocadas a apoyar a colectivos con necesidades básicas y concretas. Tradicionalmente la distribución de alimentos, ropas y medicinas. Las de servicios, cuya actividad es el aprovisionamiento de servicios de salud, educación, protección a la infancia, violencia de género, migrantes, sin techos, colectivos vulnerables, etc. Las participativas, que propone proyectos de auto ayuda en comunidades a nivel local. Su colaboración consiste en aportar bienes, servicios o capital humano para su ejecución. Y las de defensa o empoderamiento, que funcionan como elementos de presión en comunidades que necesitan de un cambio en su sistema socio-político o económico. El área de influencia puede ir de lo micro y nuclear, como un barrio, una parroquia o una asociación de vecinos, a lo macro y global, como organizaciones no gubernamentales amparadas bajo el paraguas de naciones Unidas.
Los datos aportadas por Cruz Roja Española destacan la respuesta de la sociedad española durante esta pandemia de la Covid-19. Más de 30 millones de euros donados y más de 20.000 voluntarias y voluntarios en apenas dos meses nos sitúan como unos de los países más solidarios del mundo. No obstante en el ranking de países más solidarios ocupan los primeros puestos países, que a priori, no se sitúan en la élite de la bonanza económica y social, como son Myanmar, Indonesia y Kenia. En cambio ocupa el penúltimo lugar, de un total de una lista de 138 países, la todo poderosa China.
Este año la Campaña del Día internacional de los Voluntarios sirve para dar las gracias a todo el colectivo de voluntarios del mundo y también para destacar las dificultades y las necesidades con las que desarrollan su labor altruista en la Pandemia de la Covid-19.
“Se buscan voluntarias y voluntarios para ayudar. No hace falta experiencia, sólo ganas. No se precisa mucha cualificación, sólo ilusión. No es necesaria una formación especializada, con unas dosis de entusiasmo puede ser suficiente. Como consigna La utopía es todo aquello que no se intenta”.
¡Con el voluntariado todo es posible!
BIBLIOGRAFÍA