La búsqueda de la excelencia es el título de un libro de Thomas J. Peters, que se puso de moda en los años ochenta. Trataba de explicar las razones por las que algunas empresas tienen éxito y otras no. Lo sorprendente de este estudio es la conclusión a la que llegaron: el éxito no depende de las formas de administración o de organización, sino de algo inaprensible, sutil —dice Diego Gracia—, pero que es lo que mueve a las personas: los valores”, recuerdan Juan José Pérez y Luis Andrés López, editores para la Escuela Andaluza de Salud Pública del Informe ‘Profesionalismo en salud’.
“Hoy es imprescindible que los profesionales sean competentes con valores personales adecuados que trabajen en la evidencia científica de forma interdisciplinar con buena coordinación y comunicación que asuman el control de sus resultados y que estos sean transparentes”, explica Miquel Vilardell, Catedrático de Medicina de la UAB. A su vez, la ciudadanía debe ser conocedora de sus derechos y obligaciones con una buena educación sanitaria para poder hacer un correcto uso del sistema de salud. Los políticos deben garantizar un presupuesto adecuado para mantener la solvencia del sistema y los gestores deben permitir una autonomía de gestión a los clínicos y una participación activa en la toma de decisiones junto con la ciudadanía.
La Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP) ha difundido, recientemente, un informe técnico sobre “Profesionalismo en salud”, un concepto que ha de estar presente en cada acto médico y revisarse de forma permanente, según coinciden expertos que participan en este documento.
Este Informe Técnico, elaborado por la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP), trata de la importancia de las profesiones sanitarias y la necesidad de revisar de forma permanente la idea de «profesionalismo», un concepto que hace referencia a valores y conductas que son la base de la confianza entre la ciudadanía y los profesionales de la salud.
A principios de la pasada década, se iniciaron movimientos para redefinir el profesionalismo médico y hacer frente a la crisis de valores percibida por muchos profesionales sanitarios europeos y americanos. Crisis que no ha concluido
El documento actualiza el debate sobre la excelencia en las profesiones sanitarias y se estructura en tres áreas temáticas: los retos actuales de las profesiones sanitarias; la gestión de profesionales en las organizaciones sanitarias; y el entorno de futuro de las profesiones sanitarias.
La idea actual de excelencia es un tema de interés en todo el mundo y un desafío para la profesión y para los sistemas sanitarios; la sociedad cambia de manera constante, y las profesiones deben reflexionar sobre la forma en que la sociedad necesita de su colaboración en cada momento, atendiendo de la mejor manera esas transformaciones, tal como se plasma en el documento.
Este informe recoge, entre otras aportaciones, las conclusiones de las jornadas celebradas en la sede de la EASP en enero de 2017. Como autores han participado, entre otros, el Dr. Miquel Vilardell, ex presidente del Colegio de Médicos de Barcelona; Dr. Ángel Salvatierra, presidente del Comité de Ética Asistencial Provincial de Córdoba ; Antonio Hernández Jerez, presidente de la Comisión Andaluza de Deontología Médica; Juan Cabases catedrático de Economía Aplicada de la Universidad de Navarra; Dr. Arcadi Gual, responsable del Área Profesional de la OMC; Dr. Felipe de Castro, presidente de la Sociedad Española de Educación Médica (SEDEM); Zulema Gancedo, enfermera, experta en gestión de Salud; Joan Carles March, director de la Escuela Andaluza de Salud Pública.
El documento va dirigido a profesionales e instituciones que tienen responsabilidades o tienen interés en mejorar la posición de las profesiones sanitarias en nuestra sociedad. Según los coordinadores del Informe, Juan José Pérez Lázaro y Luis Andrés López Fernández, esta obra pretende ser un libro vivo que se irá enriqueciéndose de nuevas aportaciones futuras.