Antonio Ares Camerino
“Los datos son demoledores, parece que la reticencia del personal sanitario a vacunarse de la gripe se mantiene, el porcentaje de personal vacunado es muy bajo. Según la prensa solo el 25% de los sanitarios se vacunan de la gripe, cifras escuetas que se mantienen desde hace unos años. Ello puede suponer un ejemplo negativo para la población en general, dado su papel como agente de salud y modelo a seguir en cuanto a las prácticas preventivas. La ciudadanía puede interpretarlo como un rechazo argumentando criterios de inseguridad con respecto al uso general de las vacunas. Algunos argumentan que no tienen costumbre de hacerlo, otros que si gozan de buena salud para que lo van a hacer y algunos por no considerase grupo de riesgo. Está claro que el mejor modelo preventivo es el ejemplo”.
El Día Mundial contra la Neumonía se celebra el 12 de noviembre. Esa fecha quedó establecida en 2009 tras la iniciativa de ‘Stop Pneumonía’ para crear conciencia sobre esta enfermedad y generar acciones globales para combatirla. Fue establecido por la Coalición Global contra la Neumonía Infantil, fundada en abril de ese mismo año por cuatro organizaciones clave: Save the Children, el Centro Internacional de Acceso a Vacunas (IVAC, por sus siglas en inglés) de la Escuela de Salud Pública Johns Hopkins Bloomberg, Hedge Funds vs. Malaria & Pneumonia y la Alianza GAVI. Estas organizaciones se unieron para demostrar la capacidad de salvar millones de vidas jóvenes mediante la prevención y el tratamiento de la neumonía. La neumonía causa 2,5 millones de muertes al año en todo el mundo y sigue siendo la principal causa de muerte infecciosa. Tan solo en España, causa más de 100.000 hospitalizaciones anuales.
La neumonía es una infección respiratoria aguda que afecta principalmente a la población en los extremos de la vida: niños menores de 5 años de edad y adultos mayores de 60 años, aunque puede presentarse a cualquier edad. También es mucho más frecuente en las personas con enfermedades crónicas con inmunodepresión (trasplante de órgano sólido, enfermedades autoinmunes, procesos oncológicos con quimioterapia, etc.) o sin inmunodepresión (enfermedades cardiacas, respiratorias, hepáticas y renales) y ciertos hábitos nocivos para la salud, como el tabaquismo.
Las neumonías pueden ser causadas por virus y bacterias. Entre las causas principales se encuentran la infección por el virus de la gripe, el neumococo y el coronavirus. La buena noticia es que hoy por hoy disponemos de vacunas frente a todos ellos. Se considera que la vacuna de la gripe puede llegar a evitar hasta un 60% de las neumonías que se producen en la temporada gripal. Un estudio español de reciente publicación estima que el neumococo es la causa de casi el 30% de las neumonías del adulto en España. Pero seguro que sin la vacunación el número de neumonías por neumococo serían muchas más. Sabemos que en EEUU las vacunas han reducido la incidencia de la enfermedad neumocócica en un 94% en los niños menores de 2 años y en un 60% en la población de 65 años o más.
Los datos avalan la importancia de la Vacunación frente a la Neumonía:
- Cualquier persona puede contraer neumonía, pero algunas personas corren un mayor riesgo. Las personas que pueden contraer neumonía grave son los niños pequeños, las personas mayores y las personas con ciertas enfermedades crónicas, como enfermedades pulmonares, cardiopatías, enfermedades renales o hepáticas, diabetes, anemia de células falciformes o enfermedades que debilitan el sistema inmunitario, como el VIH y ciertos tipos de cáncer.
- La neumonía puede ser grave. Los síntomas de la neumonía incluyen fiebre, escalofríos, tos, falta de aire, dolor en el pecho o una sensación general de debilidad. Las complicaciones de la neumonía pueden incluir insuficiencia respiratoria, sepsis e incluso la muerte. La tasa de mortalidad es más alta entre los adultos de 65 años o más. El diagnóstico y el tratamiento tempranos son importantes para las infecciones neumocócicas graves.
- Las vacunas pueden ayudar a prevenir la neumonía y proteger contra la enfermedad neumocócica. La vacunación antineumocócica se recomienda en niños pequeños, personas mayores y personas con ciertas enfermedades crónicas u otros factores de riesgo.
Se calcula que, en Andalucía, en un solo año, pueden llegar a morir 2.000 personas al año por neumonía o llevar a ingresar en un hospital a más de 20.000, y en un número importante de esos casos, el neumococo es la causa infecciosa principal.
La prevención fundamental se basa en la vacunación. Existen varias vacunas antineumocócicas. Las vacunas más modernas, potentes y efectivas son las conjugadas, y de ellas, la 13-valente (VNC13) es la que presta una mayor cobertura de los serotipos que circulan en España. Estas vacunas conjugadas tienen una protección más duradera y producen inmunidad de grupo, es decir, ayuda a proteger también a la población no vacunada frente a esta bacteria. La VNC13 está incluida en el calendario sistemático infantil de Andalucía desde 2016, con una pauta de 3 dosis: 2, 4 y 11 meses. Además, desde mayo de 2019, la VNC13 también se aplica en calendario a todas las personas de 65 años (nacidas a partir de 1 enero 1954) y a todas aquellas con factores de riesgo.
No tengas dudas. ¡El mejor logro de la medicina moderna han sido las vacunas!
BIBLIOGRAFIA









