7 de abril, Día Mundial de la Salud 2015
Inocuidad de los alimentos
Dr. Antonio Ares Camerino
Para los privilegiados del primer mundo la alimentación no deja de ser un acto seguro. Elegimos productos de acuerdo a nuestros gustos y apetencias. Elaboramos menús ajustándonos a nuestro presupuesto. Si tenemos posibles incluso podemos homenajearnos con algún que otro capricho culinario. La cocina está de moda. Se escogen productos con denominación de origen, se experimenta con técnicas novedosas que pronto están al alcance de cualquier bolsillo. Nuestras cocinas se han convertido en pequeños laboratorios donde proliferan aparatajes singulares e ingredientes exóticos. Interpretamos etiquetas, elaboramos menús, realizamos cálculos calóricos e incluso nos atrevemos en dotar de bondades sorprendentes a productos de uso cotidiano.
Pero la realidad es bien distinta, la mayor parte de la población mundial consume diariamente alimentos insalubres. Productos que contienen bacterias patógenas, virus, parásitos o sustancias químicas nocivas; ello provoca más de 200 enfermedades que van desde la toxiinfección alimentaria hasta enfermedades crónicas e incluso cáncer.
Los alimentos insalubres están relacionados con la muerte directa, y casi siempre de manera más o menos aguda, de más de dos millones de personas al año, especialmente niños.
La preocupación y el reto de las autoridades sanitarias internacionales no es ya garantizar la alimentación a los más de 7.000 millones de habitantes del planeta, sino hacer que estos alimentos se consuman de manera segura y cumplan su función nutritiva sin poner en riesgo la salud.
A medida que aumenta la globalización de los suministros de alimentos resulta cada vez más evidente la necesidad de reforzar los sistemas de control que velen por la seguridad alimentaria. Ésta existe cuando todas las personas tienen en todo momento acceso físico, social y económico a suficientes alimentos inocuos y nutritivos para satisfacer sus necesidades alimenticias y sus preferencias en cuanto a los alimentos a fin de llevar una vida activa y sana.
La OMS ha aprovechado este Día Mundial de la Salud 2015 para fomentar medidas destinadas a mejorar la inocuidad de los alimentos a lo largo de toda la cadena, desde la granja al plato. Esta inocuidad es responsabilidad de todos a lo largo de la cadena de producción. Desde los campesinos y los fabricantes hasta los vendedores y consumidores. Las Administraciones deben legislar la implantación de medidas de control que garanticen la inocuidad, las asociaciones de consumidores deben exigir su estricto cumplimiento.
La publicación de la OMS se centra en cinco calves para la inocuidad de los alimentos y que ofrecen a los vendedores y consumidores orientaciones prácticas sobre cómo manipular y preparar los alimentos:
- Mantenga la limpieza
- Separe alimentos crudos y cocinados
- Cocine los alimentos completamente
- Mantenga los alimentos a temperatura segura
- Use agua y materias primas inocuas.
BIBLIOGRAFÍA
- who.int/es/ (Organización Mundial de la Salud. Día Mundial de la Salud 2015)
- aecosan.msssi.gob.es (Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición. Ministerio de Seguridad Social, Salud e Igualdad)
- magrama.gob.es (Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición. Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente)
- consumer.es/seguridad-alimentaria
- fao.org (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura)