“Ante esta situación tan excepcional y difícil a la que nos enfrentamos es casi imposible no hacer nada. No dejan de salir diariamente miles de iniciativas, tanto de empresas como de particulares, que intentan poner su granito de arena para hacer las cosas más fáciles, y yo, como profesional sanitario que soy, no podía quedarme de brazos cruzados. Los médicos tenemos la obligación y la necesidad de apoyarnos y de ayudar a todos aquellos que lo necesitan. Cuando ves que compañeros jubilados vuelven a la carga te das cuenta de que tú también tienes que dar ese paso y ayudar todo lo que puedas”. María Luisa Contreras es graduada y ha dado ese paso, convencida de que puede aportar “desde esfuerzo y entrega hasta simpatía e ilusión. Cuando te enfrentas a una situación así sabes que no vas “a lo que salga”, sino que tienes que poner todos tus sentidos y todas tus fuerzas en mejorar el estado sanitario actual sin olvidar el de los pacientes. A pesar de nuestra inexperiencia, los médicos jóvenes podemos aportar esa esperanza y ese rayo de luz que quizás muchos otros hayan perdido ya por el paso del tiempo, por cansancio…”, afirma. Y, como ella, muchos otros no tienen la oportunidad de responder a la condición solidaria que da la vocación de ser médicos: “Juntos somos más fuertes. Todos, cada uno en la medida de sus conocimientos, podemos poner nuestro granito de arena para salir adelante y vencer a esta pandemia. Es en estos momentos en los que de verdad te das cuenta de que has estudiado aquello a lo que te quieres dedicar toda la vida”.
161 voluntarios responden en solo un mes a la llamada del COMCADIZ para reforzar la red de apoyo profesional frente al coronavirus
Está siendo una corriente continua y sostenida. Desde que el pasado 16 de marzo el COMCADIZ hiciera un llamamiento colectivo,...
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