‘Pachucho, cha’ vendría a definir, según la RAE, a aquella persona floja, alicaída o desmadejada, mientras que la misma Real Academia no recoge el diminutivo ‘fatiguita’ sino el común de ‘fatiga’ y entre sus acepciones la de ‘penalidad o sufrimiento’.
En la inminencia de la celebración en Cádiz del IX Congreso Internacional de la Lengua desde el próximo 27 de marzo, el Colegio de Médicos (COMCADIZ) se ha sumado a la campaña #PonUnaPalabraEnTuBalcón con estas dos palabras tan gaditanas y que en Cádiz han ampliado e instituido coloquialmente otras derivaciones menos académicas pero igualmente autorizadas y extendidas. Así, cuando aquí decimos de alguien que está pachucho, del diagnóstico se desprende un estado inquietante a falta de más certezas o precisiones facultativas.
De ’fatiguita’ hemos prendido en nuestro entender gaditano la propia acepción de mal trago o trance que recoge la Academia y hemos acuñado su género masculino. Aquí, ser un ‘fatiguita’ es acudir a todo, ser adepto a algo hasta lo obsesivo.
El COMCADIZ ha elegido estos dos términos en su relación con la salud pero que en Cádiz trascienden hasta casi un modo de estar o de ser.
Aquí lo sabemos y queremos invitarlos a la fiesta del lenguaje. A esa puesta de largo y al altavoz del Congreso de la Lengua de Cádiz para el mundo.
Porque ‘Pachucho’ y ‘fatiguita’ son un regalo para la Lengua.