“Me es imposible estar de brazos cruzados ante la pandemia. Quiero hacer todo lo posible que esté en mi mano”. Sandra Illázquez Pereira es también graduada en Medicina y coincide en que la decisión de hacerse voluntaria responde a su vocación por la medicina y por ayudar al paciente: “Ver que, pese a la mala situación en la que nos encontramos, puedo aportar mi ayuda. Puedo aportar solidaridad, ayuda, entrega, empatía, simpatía, ilusión por ejercer de lo que me gusta, puesto que no me supone ningún esfuerzo. Si ayudamos uno a uno, podemos contribuir a mejorar el estado actual sanitario”, afirma.
Sandra dice “sentir gratitud por dejarme participar en esta colaboración tan necesaria. Creo que es muy importante colaborar en estos momentos a que la sociedad se encuentre con buen estado anímico y esté lo mejor informada”.
Para quienes están pensando en unirse a esta forma de voluntariado que centraliza el COMCADIZ en el actual estado de emergencia, les alienta a decidirse: “Que lo hagan sin dudar. ¿Hay, acaso, algún sentimiento mejor que el poder contribuir a esta iniciativa tan bonita? Es en
estos momentos cuando se ve la vocación, las ganas de ayudar al paciente, el amor por la medicina. Ayudar por ayudar, sin esperar nada a cambio, es lo más bonito de nuestra profesión”.