Retener las perlas con las manos titubeantes; en la derecha, el hilo ensartado en una aguja, no muy gruesa para no resquebrajar la oscura fragilidad de la piedra. En la izquierda, el agujero estremeciéndose entre el resplandor plateado. Y el cuidado del niño que siempre intenta, con todas sus fuerzas, la perfección de la gesta… para acabar como torpes aprendices de costureras sorbiendo la sangre del dedo índice con los labios en forma de beso.
Dr. Juan Antonio Repetto, en el Día de la Profesión Médica: “La deontología médica incrementa la confianza en una ciencia ética y humana”
El Colegio de Médicos de la Provincia de Cádiz (COMCADIZ) celebró en el Palacio de Congresos el acto de homenaje...
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