Fuente: medicosypacientes
- El Equipo de Trabajo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre el Cambio Climático, las Enfermedades Tropicales Desatendidas (ETD) y la Malaria, en colaboración con Reaching the Last Mile (RLM), reveló que “aún no hay suficiente comprensión de los impactos reales y potenciales de los cambios inducidos por el hombre en los patrones climáticos sobre la malaria y las enfermedades tropicales desatendidas.
Así se puso de manifiesto en un estudio publicado en ‘Transactions of the Royal Society of Tropical Medicine and Hygiene’. El aumento de las temperaturas y los cambios en los patrones climáticos están alterando la propagación de enfermedades transmitidas por vectores, con implicaciones significativas para la salud humana y ejerciendo una presión adicional sobre los sistemas.
A medida que se expande el rango geográfico de los vectores de enfermedades como los mosquitos, también lo hace el riesgo de introducir o reintroducir estas enfermedades en áreas nuevas y no preparadas.
A este respecto, según explicaron desde la OMS, los resultados de esta revisión ponen de relieve que estos cambios en la prevalencia, la incidencia, el alcance y la intensidad de la malaria y de varias enfermedades tropicales desatendidas pueden sentirse con mayor fuerza en las comunidades que ya se ven afectadas de manera desproporcionada por ellas.
MODERNIZACIÓN
De hecho, el director del Programa Mundial de la OMS sobre las enfermedades tropicales desatendidas, que dirigió el estudio, el doctor Ibrahima Socé Fall, señaló que “las conclusiones presentadas en esta importante revisión ponen de relieve la necesidad de una modelización más completa, colaborativa y normalizada, para que podamos comprender y predecir mejor los efectos del cambio climático en el paludismo y las enfermedades tropicales desatendidas, tanto directa como indirectamente”.
«Esta revisión revela tendencias alarmantes y es un llamado a la acción urgente. Es probable que la transmisión del paludismo se desplace tanto hacia los polos como a mayor altitud, mientras que se prevé que el mosquito vector responsable de la transmisión del dengue y el chikungunya siga ampliando su área de distribución”.
En esta misma línea, la directora de estrategia de Reaching the Last Mile, Tala Al-Ramahi, subrayó que «la crisis climática tiene el potencial de revertir décadas de progreso en la salud y el desarrollo mundiales». Por ello, dijo que “se necesita urgentemente una mayor inversión en investigación para apoyar el desarrollo de intervenciones oportunas y basadas en la evidencia, y para permitirnos anticipar y mitigar las peores consecuencias del cambio climático en la salud humana».